Un diseñador de interiores es clave para conseguir dar un aire nuevo a una vivienda, especialmente si se van a llevar a cabo reformas. Todos creemos saber de interiorismo pero lo cierto es que no es así y, al final, o se tiene un gusto y un talento innatos o la mayoría de las personas acaban dándose cuenta de que hubiera sido preferible contratar a un profesional para conseguir el resultado que estaban buscando. No basta con saber elegir la ropa de hogar perfecta.
El diseñador de interiores puede ayudar en el proyecto de reforma desde el principio, primero manteniendo reuniones con los propietarios de la casa para ver qué es lo que quieren y hacerse una idea de qué es lo que están buscando para, a continuación, sugerir cambios y formas alternativas de hacer las cosas para lograr el efecto deseado.
Pero también puede tener un protagonismo más absoluto siendo quién lleve a cabo el proyecto, siempre con la colaboración de los propietarios y ajustándose no solo a sus gustos estéticos, sino también a su presupuesto económico. En otros casos, se llama al diseñador de interiores una vez que la reforma se ha realizado para que ayude en lo que es la decoración y conseguir ambientes determinados.
Decorar la vivienda
El papel del diseñador de interiores una vez acabada la reforma es aconsejar qué muebles y qué complementos decorativos se pueden comprar para lograr que la casa quede como se desea. No solo los muebles principales, sino también pequeños detalles como cuadros, jarrones o figuras decorativas.
Hasta el más mínimo detalle tiene importancia en la decoración de la vivienda y por eso no se puede olvidar la importancia de la ropa de hogar que a veces es la gran olvidada en todo este proceso.
¿Te imaginas un bonito dormitorio minimalista con una colcha de flores a todo color? Seguro que no. Evidentemente, es un ejemplo exagerado, pero con cosas mucho más mínimas también es posible romper el efecto que tanto trabajo ha costado conseguir.
Por eso, para terminar con éxito un proyecto de interiorismo, permite que el encargado del mismo escoja también la ropa para tu hogar, desde las cortinas hasta las colchas, las sábanas o los cojines. Verás como todas esas cosas son, sin duda alguna, la guinda en un pastel. Con esto, el proyecto quedará no solo acabado, sino totalmente redondo y pulido y tu hogar será perfecto.